Este extracto sobre los arcángeles y los ángeles del rayo del amor es de una conferencia dada por Elizabeth Clare Prophet de la serie El poder curativo de los ángeles, publicada en las Perlas de Sabiduría Vol. 29, nº 25 de 1986.


Archeia CharityCada uno de los siete rayos y los arcángeles que sirven en esos rayos focalizan una vibración e iniciación totalmente diferentes. Tienen que hacer amistad con los arcángeles. Ya son sus amigos. Y las legiones que sirven bajo ellos son sus hermanos y hermanas muy personales. Se mueven y hacen todo lo que pueden hacer por ustedes. Y lo que impide que ellos se entreguen total y completamente a ustedes es la ausencia de su comprensión del Llamado: invocar a los arcángeles y sus legiones de Luz en acción para que les ayuden en su camino de Cristeidad individual, para que les liberen y ayuden.

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Descubrimos, entonces, que la caridad es más que una virtud. Caridad es un ser divino, un ángel del rayo femenino que en respuesta a nuestro llamado viene a nuestro corazón. El conocimiento del llamado es la clave más importante para su victoria en la vida. Este es un simple llamado que pueden hacer:

Amada Poderosa Presencia YO SOY, amado Padre, envía a mi lado, a mi derecha y a mi izquierda ahora, al Arcángel Chamuel, a la Arcangelina Caridad. Envíamelos, oh Dios, y eleva tu poderoso Espíritu de Amor dentro de mí.

Lo pido y lo invoco con todo mi corazón.

En el nombre de Jesucristo, Amén.

Esta es una manera muy simple de componer un llamado, invocar en el nombre de su Poderosa Presencia YO SOY al corazón del Padre para que envíe sus ángeles a su lado y hacerlo en el nombre del Hijo de Dios. Ni siquiera tienen que escribirlo. Viene espontáneamente de su corazón dondequiera que vean la necesidad. Pueden hacer este llamado para sus hijos, para su familia, para los extraños en apuros.

¿Cuál es la clave al corazón de Dios? ¿Qué abre los canales entre el cielo y la tierra? Es su devoción, su más pura devoción y amor por Cristo, por Dios, por todos los santos en el cielo, por todos los millones de ángeles que sirven en el trono de gracia, por unos y otros y especialmente por ustedes mismos.

Si no se aman a ustedes mismos, ¿cómo pueden amar a su llama gemela? Y Jesús dijo: Si no amáis a vuestro prójimo a quien habéis visto, ¿cómo podéis amar a Dios el Padre a quien no habéis visto?

Así que buscamos la armonización con nuestro Padre. Buscamos todo el poder de la Luz. Buscamos ser uno, no solo con las virtudes de Dios, sino con aquellos a quienes Él ha llamado a encarnar esas virtudes: a nuestros divinos Maestros. Esta es la razón de ser de los poderosos arcángeles. Vienen a enseñarnos, a inspirarnos y a mostrarnos cómo atraer a nuestra propia aura, a nuestro propio campo de energía dinámico, al campo electrónico de la Luz alrededor de nuestros cuerpos, las cualidades del cielo, el amor de Dios, la sabiduría, la voluntad de Dios, su pureza.

Todas estas cosas son naturalmente nuestras por herencia divina, pero cuando nos desplazamos a través del mundo y su densidad, de alguna manera son absorbidos. Y así tenemos que renovar diariamente nuestro impulso, porque siempre queremos tener para que podamos dar.

La devoción, entonces, es una parte muy importante de buscar y encontrar a los ayudantes de Dios y de trabajar juntos con ellos por la paz y la libertad mundiales. Ha sido mi mayor deseo durante muchos años que el mundo entero conozca la amistad de los ángeles.

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