El esplendor del sol libera a San Patricio de Satanás
En un sermón dominical acerca de San Patricio, Elizabeth Clare Prophet leyó la carta de Patricio a Coroticus de “Las Cartas del Santo Obispo Patricio”, en El Hombre Inquebrantable*
Ella dijo, “Y espero que mientras que estoy leyendo estos relatos de la vida de Patricio, ustedes estén planeando y visualizando como pueden ustedes mismos cumplir sus destinos fogosos siguiendo sus huellas”.
De la carta de Patricio a Coroticus:
“Esa misma noche yo estaba durmiendo, y Satanás me atacó de una forma poderosa; de lo cual me acordaré mientras me encuentre en este cuerpo.
Cayó sobre mí como una enorme piedra, y quede débil en todas mis extremidades.
¿De dónde le vino a mi espíritu no escolástico el llamar a Helios?
En ese momento vi al sol salir en el cielo que amanecía, y mientras seguía invocando ‘Helias, Helias’, con toda mi fuerza, he aquí, el esplendor del sol cayó sobre mí e instantáneamente sacudió y elimino toda la pesadez que estaba sobre mí.
Creo que fui socorrido por Cristo mi Señor y que su Espíritu, aun entonces, estaba clamando por mi”.
Elizabeth Clare Prophet concluyo, “Si alguien les pregunta porque le oran a Helias, pueden citar este relato de este santo cristiano y su liberación. Por el conocimiento directo del Espíritu Santo, recibió el nombre del sol y el nombre del hijo detrás del sol, y Helias lo liberó.¿No es el gran milagro de Dios que la doctrina del Todopoderoso transciende las doctrinas de los hombres para liberar a nuestras almas?
¿Quién es Helios?
Helios y su llama gemela, Vesta, tienen su retiro etérico en el Templo del Sol que está situado en el sol espiritual detrás de nuestro sol. Pueden visualizar a Helios y Vesta como seres radiantes de luz, llamas de color rosa y dorado, con los brazos abiertos para recibirnos en el Templo del Sol.
*San Patricio, Carta a los Soldados de Coroticus, en Pablo Gallico, El Hombre Inquebrantable: Una Biografía de S. Patricio (Garden City, N.Y.: Doubleday & Company, 1958), pp. 220-25.
El artículo anterior fue tomado de las Perlas de Sabiduría®, vol. 28 no15 14 de abril de 1985